En España tenemos diferentes actos para publicitar este medio y en todas las librerías podemos encontrar un cómic en el día de hoy. El comic es cultura, ya que promueve la lectura, sobre todo para los niños pequeños, que quizás les cuesta leer mas un libro que unas viñetas.
En la Semana de las letras de la Complutense tuvimos el placer de contar con dos personas muy vinculadas a este medio, como Carla Berrocal y Luis Borruey; que nos contaron como se introdujeron en el mundo del cómic, y el trabajo que realizaron y realizan a día de hoy.
Definición
Por definir
escuetamente al cómic se puede decir que es “una historieta gráfica que
consiste en la narración de una historia a través de una sucesión de
ilustraciones que se completan con un texto escrito, aunque también hay
historietas sin texto”.
El autor de un cómic organiza la historia que quiere
contar en viñetas. Y la parte textual en lo que se conoce como globo
o bocadillo.
Características
a) La narración es rápida mediante imágenes.
b) Se reproduce el lenguaje coloquial con:
·
Titubeos (¡ca... caramba!).
· Alargamiento de palabras (cuidadooo!).
·
Frases interrumpidas (y, de pronto...).
·
Frases cortas, exclamaciones, interrogaciones... (¡Tengo
hambre!).
·
Expresiones populares (¡Córcholis! ¡Hola, chato!).
·
Reproducción de sonidos, ruidos, golpes... (¡Guau!
¡Boom! ¡Buaaa!).
·
Sustitución de las palabras por signos (?, !!, *).
c) Se utilizan recursos humorísticos:
·
Nombres humorísticos (Rompeplatos, Carpanta,
Pantuflín).
·
Imágenes (Es un lince).
·
Comparaciones (Es fuerte como un león).
·
Situaciones contradictorias (Toma guapo, aquí tengo
una porra de recambio).
·
Ironías (Con estos chicos irá usted lejos...).
·
Hipérboles (De ahí no saldrán hasta que canten los
melones).
·
Equivocaciones (¡Suelta, "Toby", que no
es un ladrón...!).
·
Afirmaciones en son de burla (¡Le felicito, Pórrez!
Esto es trabajar con tesón y esfuerzo).
Breve historia
del cómic
Diversas
manifestaciones artísticas de la Antigüedad y la Edad Media pueden ajustarse a
la definición de cómic: Pinturas murales egipcias o griegas, relieves romanos, algunas
escenas de la historia sagrada en las iglesias, manuscritos iluminados, códices
precolombinos, Biblia pauperum (Biblia de los pobres, hecha con viñetas para
que los que no sabían leer pudieran entenderla).
Con la
invención de la imprenta (1446) se producen ya aleluyas (es una exclamación de
júbilo en la religión para alabar al Creador y su obra). Pero no sólo las
aleluyas sirvieron para la religión, sino como primera lectura de los más pequeños.
Texto de Antonio Martín:
“La función de lectura de estos impresos era fundamentalmente
visual, en tanto que las primeras
aucas y aleluyas transmitían
información y ofrecían recreo por el
solo consumo de las series de imágenes,
que no llevaban textos de ningún tipo.
Mientras que cuando el pliego de
aleluyas incorporó los textos, éstos
fueron fundamentalmente de
apoyo, como refuerzo o explicación complementaria
de lo que las imágenes contaban. Es así cómo los textos -generalmente
en verso- refuerzan el valor de
la aleluya como material de lectura, de modo que esta constituye el primer escalón en el
desarrollo de la lectura voluntaria de muchos niños del XVIII y XIX”.
Es decir,
que con la de la litografía (1789), se inicia la reproducción masiva de
dibujos.
Sigo citando a Antonio Martín: “El hecho es que en las aleluyas hay una lectura de las imágenes y paralelamente
una lectura de los textos que apoyan a
éstas. Así evolucionan desde su primer estadio como juego o como
catálogo de imágenes curiosas o exóticas, con cierto valor
didáctico, al más complejo de una
historia que se narra a través de una
síntesis de imágenes aisladas -que implica un importante
esfuerzo de elipsis, tanto en los autores como en los lectores- en las que se recogen una serie de momentos
significativos de la biografía, el relato
o la novela que constituye el tema de
las viñetas de la aleluya”.
Entre otros
títulos, a las que se unen las aleluyas
referidas a obras literarias como “Fábulas de
Esopo”, “Aventuras de Telémaco”,
“Fábulas de Iriarte”, “Don Quijote de la Mancha”, “Robinson Crusoe”, etc.
Con posterioridad, otros títulos y personajes han hecho las delicias de un público amante de las historias en viñetas, como son: Flash Gordon, El Príncipe Valiente o el Tintín. Personajes intrépidos y valientes que realzan más si cabe la extraordinaria labor de los dibujantes y guionistas, en definitiva, creadores de Cómic.
En este caso nos acompañan: Carla Berrocal, Luis F. Borruey, pero antes de pasar a ellos, un breve apunte de relación entre el cine el cómic.
Ambos comparten una larga historia de influencias mutuas y a ese respecto Federico Fellini decía que: “los cómics que se realizan acercándose demasiado a la técnica cinematográfica son para mí los menos hermosos, los menos logrados» de tal manera que los «que merecen consideración son aquellos que han inspirado al cine y no al revés».
Las nuevas tecnologías ponen fácil la comunicación y el poder ver sus creaciones, algo que resumo con una solo palabra para ambos: geniales.
Fue una charla didáctica, amena, completa y con muchas preguntas de parte de los que asistieron a la charla en la Facultad de Ciencias de la Documentación.
2 comentarios:
Interesantísima mesa redonda, unos ponentes profesionales como la copa de un pino y remajos.
Estuvo fenomenal, enhorabuena ademàs a la idea original y a toda la organización del evento.
Sería estupendo preparar otra para el curso siguiente.
Como me hubiese gustado asistir a la mesa redonda para tratar el tema del comics. Me ha parecido muy interesante.
Saludos
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